Madrid 29 de junio de 2019.
Una de las primeras medidas anunciadas por el nuevo gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha sido la cancelación, al menos durante dos meses, de la Zona de Bajas Emisiones de Madrid Central, aplicando una moratoria de las multas a partir del próximo 1 de julio.
Como profesionales de salud pública (médicos, enfermeros, psicólogos, farmacéuticos, etc.), queremos recordar que Madrid Central tiene el objetivo primordial de mejorar la salud y el bienestar de la población, sobre todo de los residentes en la zona afectada. Está demostrado y admitido que la mejora de la calidad del aire aumenta la salud y la calidad de vida.
La contaminación atmosférica es una amenaza para la salud pública
La contaminación del aire es una amenaza silenciosa que afecta muy negativamente a la salud pública. Se estima que alrededor del 92 % de la población que vive en ciudades no respira aire limpio. Desde el punto de vista científico, hay evidencias de que al aumentar la contaminación del aire que se respira, aumenta también la mortalidad, la incidencia de diversas enfermedades y los ingresos hospitalarios. Los efectos son peores para ancianos, embarazadas, población infantil y pacientes con enfermedades cardiacas y respiratorias previas. También es preciso mencionar que la contaminación genera un aumento de los costes socio-sanitarios. Sin embargo, estos efectos no se perciben de forma evidente, y esto puede explicar la baja sensibilidad de algunos sectores de la población e instituciones, sobre la importancia de evitar la exposición a este riesgo. Por esto es necesario explicar y concienciar sobre la necesidad de respirar, en el día a día, un aire limpio. La OMS ha señalado este año que la contaminación del aire, junto con el cambio climático, es la principal amenaza mundial contra la salud.
Las autoridades públicas tienen la obligación de mejorar la calidad del aire
La buena noticia es que los niveles de contaminación atmosférica puede ser reducidos y su prevención y control es rentable. En los países y ciudades comprometidos en la lucha contra la contaminación atmosférica, muchos de ellos de la Unión Europea, se ha reducido la exposición de la población y se han demostrado beneficios directos sobre la salud y la calidad de vida. Es prioritario que los líderes políticos y los gobiernos incluyan en sus agendas el compromiso de luchar contra la contaminación atmosférica.
La ciudad de Madrid llevaba más de una década incumpliendo la normativa comunitaria, superando los niveles máximos admitidos de contaminación atmosférica. De hecho, Madrid fue en 2018 la ciudad española con mayores problemas de contaminación. Durante muchos años los niveles de calidad del aire han excedido los límites fijados por las directrices de la Comisión Europa, con la amenaza de recibir una sanción por el continuo incumplimiento y por no implantar medidas estructurales para su mejora.
En este contexto, la creación de la Zona de Bajas Emisiones de Madrid Central se realizó para mejorar la calidad del aire de la ciudad. La ciudad de Madrid, así como el resto de municipios de la Comunidad de Madrid, debe contar con planes de control de la contaminación del aire a corto, medio y largo plazo. Las instituciones municipales y autonómicas con competencias en este tema deben demostrar una voluntad clara de mejorar la calidad del aire que se respira en la región, hecho que además será reconocido por las autoridades europeas, y evitará posibles sanciones por incumplimiento de la normativa europea de calidad del aire.
Hay que dar tiempo para poder evaluar los efectos de Madrid Central
Desde AMASAP dijimos que Madrid Central era un paso importantísimo en la lucha contra la contaminación atmosférica urbana, y que esta medida debía ser considerada como el inicio de un largo camino para conseguir respirar un aire más limpio.
Aunque la adecuada evaluación de los efectos de una intervención de este tipo sobre la salud y sobre la calidad de vida necesitaría que esta medida se mantuviera un periodo de tiempo más prolongado, en los primeros meses de funcionamiento de Madrid Central ya han aparecido informes técnicos que apuntan a una reducción de la contaminación superior incluso a la esperada. Su mantenimiento en el tiempo permitirá consolidar estos resultados.
Tenemos que señalar además, que el diseño, planificación y ejecución de Madrid Central se ha realizado con mucho esfuerzo y recursos municipales y que ha sido bien valorado y respaldado por la Comisión Europea.
Por ello, consideramos precipitada y desafortunada la decisión del nuevo gobierno municipal, de cancelar Madrid Central; hecho que impedirá evaluar su impacto sobre la calidad del aire y sus efectos en la salud de la población a medio y largo plazo. Defender Madrid Central es anteponer los intereses generales a los particulares, en favor de la salud pública que nos pertenece a todos.
Por todo lo anterior, los profesionales de la Asociación Madrileña de Salud Pública (AMASAP) queremos defender la implantación de medidas que mejoren la calidad del aire en la ciudad de Madrid y en el resto de la Comunidad de Madrid y solicitamos que se mantenga el proyecto Madrid Central, por sus previsibles beneficios sobre la salud y la calidad de vida de la población. Animamos al nuevo gobierno municipal a seguir con el proyecto, a evaluarlo, y a mejorarlo en la medida en que sea necesario.
Comunicado DEFENSA Madrid Central_v3