La falta de inversión en atención primaria previa a la pandemia y una gestión sanitaria que ha adolecido de falta de planificación y recursos suficientes para afrontarla, deja abandonadas a personas vulnerables, enfermedades desatendidas y diagnósticos, en algunos casos, demasiado tardíos.
Las mujeres, que representan el 75% de las personas cuidadoras, y el 78% del personal sanitario contagiado han sufrido de manera especial el impacto de una atención primaria debilitada.
Un nuevo informe, “La otra pandemia”, centrado en Cataluña, Madrid y Castilla-La Mancha, analiza además cómo, en plena campaña de vacunación, el personal sanitario sufre la sobrecarga asistencial y el desamparo.