En el mes de enero SESPAS remitió a la Comisión Europea una carta en la que mostraba su preocupación por los efectos sobre la salud humana y ambiental causados por las sustancias capaces de alterar el sistema hormonal, conocidas como disruptores endocrinos.
El pasado 14 de julio la Comisión Europea ha hecho llegar su respuesta a dicha carta, firmada por Karl Falkenberg, Director General de Medioambiente.